Construir con barro, la naturaleza como elemento

EDICIÓN IMPRESA

Sociedad 19 de mayo de 2017 Diario Sumario
"Nadie debería estar viviendo en una casa de plástico y cartón. Todo hombre debería tener el derecho de poder construir su propia casa” (*)

Federico y Melisa viven desde hace dos semana en una casa ecológica construida en el Valle de Alta Gracia, más conocido como "La Marianita”. "Masche”, un perro negro que vigila el hogar recién inaugurado, cierra las filas de esta pequeña familia que decidió por convicción y conveniencia meter las patas en el barro e innovar en la construcción de su casa. El barro y la paja, las botellas y los neumáticos, son la materia prima de esta vivienda de 60 metros cuadrados, construida por sus dueños. Además, familiares, amigos y colaboradores, formaron parte de la cuadrilla de construcción que ofició de albañiles, cuya destreza hace destacar esta casa de las otras que forman parte del vecindario. "Mientras estábamos construyendo mucha gente que pasaba se paraba a mirar. Les parecía muy raro lo que estábamos haciendo, entonces los hacíamos pasar a mirar y cada tanto volvían para ver como avanzaba el trabajo. Era como un museo”, relata Melisa mientras detiene su mirada en los rincones de la casa, como anotando mentalmente los detalles que faltan terminar. 
La obra no contó con la supervisión de ningún profesional. Las nociones que Federico adquirió durante su paso por el IPET N° 247 "Ingeniero Carlos A. Cassaffousth" de la ciudad de Córdoba, el asesoramiento de algunos profesores y sus cualidades de constructor autodidacta, fueron suficientes para levantar las cuatro paredes de esta casa, que  se construyó con 5000 botellas y 200 neumáticos de automóviles, alberga una cocina, un dormitorio y un baño, y tiene prevista para el futuro una ampliación para dos dormitorios más.
El terreno que soporta los cimientos de la eco-casa, fue adquirido por la pareja en 2014, mientras que en octubre de 2016 comenzó la obra. Los primeros tiempos fueron incómodos, porque Fede se instaló en el terreno y vivió durante un tiempo en una carpa. "Con Mauri Córdoba – el vecino – vivíamos de la misma forma, en carpa. Hacíamos de comer para los dos, para no perder tiempo, y volvíamos a trabajar, cada uno en su casa, pero dando una mano cuando el otro necesitaba algo”, recuerda Federico, que entre mate y mate, detalló cómo una simple idea fue tomando forma y se convirtió en una casa. "La idea de una casa ecológica siempre fue una posibilidad, buscamos mucho por Internet, nos llenamos de ideas y fuimos probando. Primero porque los costos son mucho menores, pero también porque tiene muchos beneficios, la resistencia y la termicidad por ejemplo”, explica Federico. "Cuando Fede me lo planteó, yo lo veía como algo lejano. ¡¿Qué vamos a hacer algo de barro?!, decía, pero fijate vos que después se fue dando”, cuenta Melisa. 
 

La cuadra de las eco-casas

Algunos de los vecinos de esta joven pareja también optaron por la construcción con materiales naturales. Dos viviendas, una de ellas ya finalizada y otra en vías de ser terminada, utilizaron elementos como el barro, la piedra, la madera y las botellas para levantar sus paredes. Una tercera vivienda comenzará a ser construida en breve, y también tendrá como materia prima estos componentes poco convencionales para la construcción.


*Carlos Belanko: Constructor especializado en materiales naturales, principal referente de este sistema en el país.

Te puede interesar
Ranking

Suscríbete al newsletter para recibir periódicamente las novedades en tu email