El río y las montañas como parte del aula

(Alta Gracia, de nuestra redacción) Laura Obolevich y Carolina Catania son dos maestras que viven en Alta Gracia y viajan todos los días a las escuelas rurales de Punta de Agua y San Clemente. Allí comparten la jornada con  los alumnos y las familias. Afirman que estas instituciones constituyen un punto de encuentro para los habitantes de cada lugar, que viven campo adentro. 

Laura tiene 20 años de experiencia en la docencia y seis en el IPEM 345 anexo Punta de Agua. Carolina tiene 10 años de profesión y cinco en el jardín de la escuela Presidente Yrigoyen anexo San Clemente.

Laura: Empezamos con nueve alumnos en primer año y ahora tenemos casi 80. La mayoría de los varones trabaja en los cortaderos. Son familias que toda la vida se dedicaron a eso. Tenemos más de 20 cortaderos en la villa. Los chicos están en la escuela hasta las 12.30 porque no tenemos comedor. Lo estamos peleando desde que empezamos con la escuela. Hasta el año pasado, nos mandaban dinero de Nación y le comprábamos a los chicos botas de agua, zapatillas de cuero, y en una época capas y hasta bicicletas. También logramos que el colectivo que viene de Carlos Paz llegue a la escuela. Los chicos, sin esta escuela, tendrían que salir de Punta de Agua y están metidos campo adentro. Si no hubiera sido por este secundario, son muy pocos los que seguirían, el 2 por ciento de la comunidad escolar sigue al secundario.

Carolina: Para mí es una experiencia hermosa, empezamos con mucho miedo. En ese momento, el camino todavía era todo de ripio. Pasamos varias experiencias bravas con el auto, hoy con la ruta nueva estamos en 35 minutos. El camino es hermoso, todos los días es distinto. Nosotras elegimos esto con mucho miedo pero no volvemos atrás de ninguna manera. La escuela es un punto de encuentro para la comunidad sobre todo para los chicos, que viven alejados unos de otros. El vínculo que se forma entre ellos es muy familiar, llegan y se abrazan. Este año vamos a tener 12 niños en el jardín porque se suman los de 3 años. El jardín funciona en un aula que le presta la escuela primaria. El grupo de padres es incondicional, ellos están para todo lo que uno necesite hacer a favor de los chicos, todo lo que pueden. Hay muchas casas turísticas que también colaboran mucho con la escuela. 

Carolina: Aparte de ser un lugar paradisíaco, la escuela está entre dos arroyos. Nosotros le sacamos el jugo a eso. Aprovechamos ese contexto, trabajamos mucho lo que es el ambiente natural y se da clases afuera, que es parte del espacio áulico. A través del área educativa del Museo de la Estancia trabajamos mucho, creamos la orquesta con instrumentos que nos dio el Ministerio de Cultura; eso fue maravilloso. También se hizo un libro de flora y fauna de San Clemente, de niños para niños. El aprendizaje de uno es tremendo, lo que ellos saben de plantas y animales es lo que está en el diccionario.

Laura: Ellos te dicen tal yuyito sirve para tal cosa, si le duele la cabeza dígale a la cocinera que le haga un tecito de tal yuyo.

Carolina: El objetivo es revalorizar ese patrimonio que muchas veces se subestima, lo valioso que es su lugar. Tuvimos la suerte, gracias a la colaboración de mucha gente y de la comuna, de poder ir a Buenos Aires a presentar el libro al Museo José Hernández. También colaboró con nosotros Raúl Porchetto que vive en la zona.

Laura: El lugar, a través de la escuela, va superando muchas cosas. Que estos chicos tengan la posibilidad de tener un secundario es importante, este va a ser el tercer egreso. Todos van estudiando algo, nosotros tenemos especialidad en Turismo y los chicos van a trabajar a Carlos Paz, por ejemplo, y no terminan toda su vida en el cortadero. Le estamos dando otra posibilidad y eso no tiene precio.

El esfuerzo del viaje diario se ve enormemente compensado para estas docentes. En estas escuelas, varios cursos conviven. Por un lado, esto da cuenta de las deficiencias edilicias en la zona, pero por otro suma en cuanto a la interacción entre los alumnos. "Muchos de ellos son hermanos, los más grandes ayudan a los más chicos, es un vínculo maravilloso", cuentan.  

Ambas destacan la importancia del material educativo y didáctico que recibían años anteriores y que dejaron de recibir desde que cambió el Gobierno Nacional. Por otra parte, mencionan la importancia de la lucha docente que se lleva a cabo en la provincia y que, hasta el momento, demorará el inicio del año lectivo. "El reclamo no es sólo salarial, se están recortando recursos, material didáctico y la posibilidad de los docentes de capacitarse. En un tiempo las capacitaciones debían pagarse, en los últimos años volvieron a ser gratuitas con capacitadores del Estado y ahora los capacitadores ya no están y tenemos que volver a pagar. Se hace muy difícil", afirman.