Con dolor vemos las imágenes del bosque andino patagónico consumido por el fuego. Temperaturas extremas que rompen récords históricos y falta de humedad se convierten en un cóctel explosivo. Sin embargo, nada de esto fue imprevisto. Las condiciones meteorológicas se anticipaban hace semanas y nada se hizo para preparar el sistema de alerta temprana y contener a tiempo.
Durante 2020 y mientras Córdoba se quemaba sin contar con los recursos necesarios para combatir el fuego, buscábamos impedir, en el Congreso, que el oficialismo recortara los fondos del Sistema Nacional de Manejo del Fuego y de Riesgos de Desastres. Luego vino el debate por la ley del fuego, que en honor a la verdad debería llamarse la “ley del humo”. Una ley que vendieron como herramienta para disminuir los incendios especulativos, pero lo único que hace es legislar sobre cenizas. Una ley que, además, baja la protección a perpetuidad que tenían los bosques -patagónicos entre otros- para poner, en cambio, un plazo mucho menor del que necesitan para recomponerse.
Vender humo, construir relatos, pero nunca anticiparse, preparase, construir políticas públicas efectivas. Ese no puede ser el camino para enfrentar estos retos.
Voy a decir una obviedad: el cambio climático también nos afecta a nosotros como país. Sin embargo, no estamos pensando en acciones reales de mitigación (reducir emisión de gases de efecto invernadero) ni adaptación (reducir nuestra vulnerabilidad ante los efectos del cambio climático). La resiliencia de las ciudades, un tema clave a nivel global, en la Argentina está completamente ausente. Preparar las ciudades para el impacto del cambio climático salva vidas. Sin embargo, ver como recortan a la mitad el fondo para el Sistema de Gestión de Riesgos de Desastres es sólo un botón de muestra que refleja la miopía de quienes están gobernando.
Los problemas son complejos, las soluciones también. De mínima: equipen a los bomberos; inviertan en infraestructura necesaria; acuerden, diseñen y ejecuten programas de alerta y respuesta temprana que potencien la colaboración de las jurisdicciones antes de que sea tarde; y dispónganse a tratar los proyectos que crean las figuras de delitos penales ambientales. Y, luego, trabajemos en las acciones del mediano plazo para que las urgencias que se estampan como bichos contra el vidrio no nos impidan ver a dónde queremos ir y qué tenemos que hacer para revertir los problemas estructurales.
No es "la Argentina", como dijeron en el Ministerio de Ambiente con resignación para justificar la falta de recursos. Es el modo en el que eligieron gobernar. No es con humo el camino, es con decisión política de priorizar, en serio, la defensa del ambiente.
(*) Diputada nacional por la UCR - Córdoba.
Por qué Sí son 30.000 ¿de dónde salió la cifra del horror?
Alta Gracia: vecinos "justicieros" se enfrentan a los ladrones
Desde febrero, Alta Gracia adhiere a la Ley Integral de Seguridad. Sin embargo, muchos delitos en la ciudad son "resueltos" por civiles que se encuentran frente a los hechos. Ante la grave crisis y el aumento del crimen, no parece haber medidas que den respuestas.
Anisacate: Incapacidad de gestión y servicios básicos
El servicio de agua pasó de bimensual a mensual, con aumentos de hasta el 400 por ciento en la facturación. Hogares que pagaban unos $1.250 de manera bimensual, por un consumo de 15 metros cúbicos, hoy reciben boletas de $14.000 mensuales.
Ley Ómnibus: las represalias de Milei las sufre la gente
HORÓSCOPO. La influencia de los astros en la vida y el destino de las personas.
Córdoba: siguen las asambleas y confirmaron dos paros de transporte
Luego de la medida tomada este jueves, AOITA anunció una asamblea para mañana viernes y nuevos paros en el transporte interurbano provincial.
EXCLUSIVO: imputaron a un cuidador acusado de abusar a una paciente
El caso se encuentra en plena etapa investigativa y el hecho se produjo en una clínica dedicada a la salud mental y la discapacidad.
Falso acuerdo: el intento del Gobierno de desarmar la marcha universitaria
El Ministerio de Capital Humano había anunciado un aumento del 70% para gastos de funcionamiento, lo que representa un 10% del presupuesto total. En los medios circuló como un acuerdo, cuando en realidad, fue una decisión unilateral del gobierno libertario.
Si bien declaró que va a tener “las mismas tareas, con otro rango y jerarquía, con una diferencia mínima de sueldo”, parece que no pudo cumplir con su habitual conferencia de prensa un día después de su ascenso a secretario de Estado.