Bonfigli dice que Cosag debe conservar la concesión

“La gente se ha pronunciado, y la voz del pueblo es la voz de Dios”, sentenció el Intendente Mario Bonfigli, cuando aún resonaban los ecos de la masiva audiencia pública realizada la noche anterior, para definir el futuro del servicio de agua en Alta Gracia. El jefe de la administración local aclaró que tenía “un objetivo de máxima con algo que creíamos que sería superador, pero si la gente cree que está bien con lo que está… en definitiva uno dirige, orienta, pero la última palabra la tiene el pueblo, y si quiere que siga la Cosag hay que dejar que siga”. No obstante, Bonfigli aclaró que “vamos a darle la razón al pueblo, pero seguimos convencidos que una cooperativa que no tiene 12 mil pesos para pagar los balances y ponerlos al día, no tiene mucha espalda para prestar el servicio, así que acompañaremos lo que la gente pide, para asegurarnos desde el Estado que eso no vuelva a desmadrarse”. El mandatario advirtió que “hay que escuchar lo que también dijo la gente en cuanto a una nueva concesión, y pidió controles”. En ese sentido Bonfigli se mostró partidario de firmar un nuevo contrato de concesión del servicio de agua y cloacas a favor de Cosag, aunque modificando algunas cláusulas de modo de incorporar dos fondos permanentes (uno de emergencia y otro de inversión), la figura de la tarifa social y un ente de control “absolutamente despegado de intereses políticos y de intereses internos de cosag”. A su vez, el Intendente juzgó que “los sueldos del los controladores los tiene que pagar el controlado, porque si estamos controlando, es por algo”. Al fundamentar su postura, Bonfigli dijo que el Fondo de Emergencia, deber ser “intocable”, y “no que nos digan que se nos cayó un cerro en el año ´99 y parece que todavía lo estamos pagando, aunque allí trabajaron Epec, hidráulica de la Provincia y no tanto la Cosag, pero bueno… un fondo intocable, por si se nos cae otro cerro”, ironizó. También cargó contra la falta de inversiones de la cooperativa para justificar la necesidad del otro fondo: “Debería haberlas y no las hubo, la colectora sur que es la obra más importante se hizo con fondos de la Provincia, en los últimos seis años las cloacas las hizo el Estado, la Municipalidad en seis años hizo el doble de cloacas que la Cosag en 15”, disparó. Durante la mañana del jueves 15, Bonfigli se reunió con el Viceintendente Oscar Tissot y los concejales oficialistas Ana Pochetino y Miguel García, a quienes les trasmitió su punto de vista, aunque aclarando que “los concejales deberán decidir”. Días atrás, el radicalismo recordó el carácter no vinculante que la Carta Orgánica le otorga a la figura de la Audiencia Pública. “Pero para algo la hacemos” –reflexionó Bonfigli- “es para abrir los oídos y escuchar lo que piensa el resto de la gente. Es un mandato popular y hay que cumplirlo. Ese mandato también incluye el control, que no hay que abandonarlo”. La audiencia En un hecho histórico, la primera audiencia pública que se realiza en Alta Gracia reunió a unos 200 vecinos en el salón del Smata, una de las salas más grandes de la ciudad. Fueron 85 las personas que se anotaron para hacer uso de la palabra, aunque finalmente sólo hablaron unos 40 oradores. El acto comenzó pasadas las 20, con la exposición de los proyectos existentes sobre el futuro del servicio de agua y cloacas, y culminó pocos minutos antes de la medianoche. Los tres bloques que componen el legislativo local comenzaron sintetizando sus propuestas, tras lo cual hicieron lo propio la Comisión Vecinal de Bº Carlos Pellegrini y el Frente Para la Victoria. Tras las exposiciones, se abrió la lista de oradores. Con una marcada supremacía de personas a las que suele vincularse con el Partido Justicialista, vecinos e integrantes de distintas agrupaciones políticas y sociales, fueron dando sus puntos de vista. El apoyo a la continuidad de la cooperativa fue abrumador. No habrá vuelta atrás Por Jorge Conalbi Director Periodístico “Si yo decía lo que iba a hacer, perdía las elecciones”, dijo Carlos Menem en 1990, jactándose de haberle mentido a sus votantes de 1989. Incluida hace más de una década en la Carta Orgánica Municipal, la Audiencia Pública -figura contemplada en el capítulo dedicado a “otras formas de participación ciudadana”- hizo su debut el pasado 14 de julio, con el objeto de discutir algo tan esencial como el futuro del servicio de agua y cloacas de la ciudad. Quiso la casualidad que la fecha coincidiera con el aniversario de la Revolución Francesa, símbolo del republicanismo. Dos centenares de vecinos colmaron el salón del Smata para conocer las distintas propuestas y, mayoritariamente, apoyar la continuidad de Cosag a cargo de la concesión del servicio. El peronismo de Alta Gracia, que trabajó activamente a favor de la cooperativa, disfruta de una victoria política que –de contar con un candidato lanzado- podría haberle abierto las puertas a un posible retorno al gobierno municipal. Pero no tiene postulante para el Sillón de Lepri. El radicalismo no supo capitalizar las quejas, dudas y sospechas que buena parte de la ciudadanía mantiene sobre la Cosag, y perdió la batalla. El socialismo -que quiso hacer valer el peso de su voto para darle los dos tercios que el oficialismo necesita- se preocupó por influenciar con propuestas propias el proyecto de ente oficial y terminó aislado, sufriendo una derrota ajena. Sin embargo, la primera Audiencia Pública realizada en la ciudad dejó una enseñanza formidable: cuando a la gente se le abren los canales de participación, participa. Cuando -como en este caso- se vislumbra que la opinión popular será tenida en cuenta, se incentiva el compromiso ciudadano con las cuestiones públicas. En este camino, no hay vuelta atrás. Ni lugar para los políticos mentirosos.